DOLORES no es la mitad del camino,
DOLORES es el DESTINO.
Esta frase cobró fuerza en la voz del inolvidable presentador Ismael Rossi, en los inicios de cada edición anual de la Fiesta Nacional de la Guitarra, en la Ciudad de Dolores. Es parte de un puñado de coplas y versos que se podían desprender de algunos de mis cuadernos con textos armados especialmente para Un Canto a la Vida, cuando Ismael -por entonces con su identificación original -Héctor Ismael Garaguso- emitía a diario esa perla por Radio Excelsior de Buenos Aires, acompañado. al aire, por Florencia Ibáñez y con algunas de mis producciones de audio como parte de su contenido.
Sí. Fui su más histórico amigo en el universo de los medios de comunicación. Después, la vida nos puso en escenarios diferentes. Él, específicamente, en todos los escenarios del país presentándole a sus respectivos públicos, el arte de trovadores argentinos, que aún lo recuerdan como el mejor, más creativo y más energizado maestro de ceremonias que haya dicho alguna vez su nombre o el nombre de su grupo folklórico.
La pena -que alguna vez hablamos entre ambos- es que, al ser tan buen docente en la preparación de locutores, haya generado tanto entusiasmo en tantos jóvenes, justo cuando la profesión está terminando de cerrar su puerta a la vida activa para pasar a ser un museo de la historia comunicacional del país.
De todos modos, en el recuerdo del inmenso Ismael, a quien perdimos un 5 de junio, en el año 2015, los aludidos versos en falsa copla, que integraban un sinnúmero de juegos de palabras compartidos con él, gracias a su iluminado ingenio, su insuperable capacidad de homenajear a los artistas y a la tierra:
Y más y más: su generosidad de valorar el trabajo de todos, tanto el del halago renovado a los grandes artistas, el del estímulo a los emergentes y la cercanía con todos los trabajadores de cada festival, cada radio y cada viaje. Su perfil se completaba con la solidaridad y virtual bendición a sus colegas.
Spanish (Spain) 
Spanish (Argentina)