• Diario 5 -Buenos Aires, jueves 10 de octubre de 2024

Cumplir

El momento en que la dirigencia argentina más trabajó por el país fue en los albores de una Democracia a la que todos comprendíamos como probablemente débil, si no actuábamos con un alto nivel de responsabilidad institucional, políticamente decididos y vocacionalmente aferrados a la idea de Patria.

La imagen muestra a Hebe de Bonafini y sus compañeras de Madres de Plaza de Mayo cumpliendo con tales premisas en el momento necesario. Se trata de la visita al entonces presidente electo, Raúl Alfonsín, quien recibió a las luchadoras por los Derechos Humanos en noviembre de 1983.

Lo mejor de su vida pública, claro está.

Hebe de Bonafini falleció a los 93 años y cuyos últimos 30, eligió atravesarlos sin medir efecto alguno en las polémicas que abría o de las que participaba y en las que se solían colar fuertes muestras de intolerancia con adversarios políticos o con gente ajena a su empatía.

No fue una argentina cualquiera. Se fue un factótum central de aquella novedosa imposibilidad de que en nuestro país se acceda al gobierno por la fuerza.

Las falibilidades humanas suelen alcanzar a los prohombres (la expresión abarca, de plena inclusión, a mujeres con tales valores) del mismo modo como se instalan en los cristos de a pie. Con todo, entendemos que vale la pena ser equilibrados en la administración de penas, piedades e indulgencias, más cuando hablamos de aquellas personas a las que unos las consideran dueñas de una gloria alcanzada por mérito constante y otras les observan desaceleraciones en el mismo camino al bronce.

Cumplir

Cumplir

Cumplir

Cumplir

Cumplir

Cumplir

Cumplir

Cumplir

Cumplir

Cumplir

Cumplir

Cumplir

Cumplir

Cumplir

Cumplir

Cumplir

Cumplir

Cumplir

Cumplir

Cumplir

Cumplir

Cumplir

Cumplir

Cumplir

Cumplir

 

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *