¡Ah, qué pistolas, los planchas estos! Se mandan a la fiesta «X Future» en Villa Riachuelo, haciéndose los cracks, los reyes de la noche, pensando que son los más capos del planeta. Pero claro, ahí estaban los equipos de la Poli de la Ciudad, con los ojos bien abiertos, listos para cazar a estos forritos. ¿Qué se pensaban? ¿Que iban a jugar a lo traka traka con sus bolsitas de merca y sus pastillitas mágicas como si nada?
Cayeron like flies*, ¡46 impresentables! Les incautaron de todo: 27 pastillas de éxtasis, dosis de MDMA, tusi (sí, esa porquería rosa que se creen es la nueva moda) y falopa de la fina. ¿Y qué onda? ¿Se pensaban que son los nuevos rockstars? No, papá, lo único que son es un montón de pelotudos inseguros que no entienden que la dignidad no se compra con droga.
La División Investigaciones Antidrogas Zona II, unos capos en lo suyo, los embocó en los controles ahí cerquita del Autódromo. No les dejaron ni una pastilla para que se hagan los vivos, ¡nada! Les cayeron con todo, por infracción a la Ley de Drogas, la 23.737, y encima les clavaron 7 actas contravencionales. Mirá qué panchos.
¿Qué creían, que los chabones que se cuidan y disfrutan sin drogarse son unos nabos? El verdadero capo no necesita clavarse nada para pasarlo bomba. Los que eligen los caminos sanos son los que, cuando se les pase la joda, van a estar disfrutando de alta vida, mientras que estos cornetas van a terminar chufeta. Pero claro, eso no lo ven ahora, cegados por la ondita del momento, que les hace creer que sus penes y vaginas son el tesoro de los grandes ganadores.
Así que, chabones, sigan creyéndose los bananas de la noche, que cuando la realidad les pegue en la cara, no va a haber fafa que los salve. ¿Quiénes son los verdaderos giles, maestro?
*Como moscas