Una vez más, la Ciudad de Buenos Aires se suma a esta propuesta recibiendo durante todo este mes las llamadas «Botellas de Amor». Lo efectiviza en los Puntos Verdes Móviles.
¿Qué son las «Botellas de Amor»? Como resulta complejo reciclar los plásticos de un solo uso, es necesario diferenciarlos aprendiendo la manera de identificarlos. Al conseguir separarlos del resto de los componentes reciclables, se disminuyen la contaminación. Son los que se alcanzan a transformar en «madera plástica». Esto materiales son utilizados para fabricar productos que pueden integrar el mobiliario urbano.
«Julio sin plástico» es una campaña ambiental que tiene como objetivo reducir el consumo de plástico y promover un estilo de vida sostenible. Anima a las personas, comunidades y empresas a evitar los plásticos de un solo uso durante todo el mes de julio y más allá.
La campaña forma parte de la iniciativa que la fundación Plastic Free Foundation inició en 2011 en Australia. Desde entonces, se convirtió en un movimiento global con millones de participantes de más de 170 países.
Los objetivos principales de Julio Sin Plástico son crear conciencia sobre el impacto ambiental de la contaminación plástica, alentar a las personas a reducir su dependencia de los plásticos de un solo uso e inspirar cambios a largo plazo en el comportamiento del consumidor hacia prácticas más sostenibles.
Con las actividades que se proponen desde la entidad se anima a los participantes a rechazar artículos de plástico de un solo uso, como pajitas, bolsas y botellas. La entidad promueve optar por alternativas reutilizables (por ejemplo, bolsas de tela, botellas de agua de acero inoxidable, envases de vidrio). En algunos países, como Suecia y Finlandia, se organizan limpiezas comunitarias para eliminar los residuos plásticos de los entornos naturales.
La Plastic Free Foundation no pierde oportunidad en recordar la importancoa de educar a otros sobre el impacto de la contaminación plástica y cómo reducirla. Su sitio web de Julio sin plástico ofrece recursos para ayudar a los participantes. Allí hay consejos y guías para reducir el uso de plástico, historias y testimonios.
El programa «Julio sin plástico» apunta que individuos y grupos pueden comprometerse a participar en la reducción de plásticos que llegan al mar. Según la PFF, el movimiento logró reducir el uso de plástico. Muchos participantes afirman haber adoptado cambios duraderos en sus hábitos, lo que contribuye a reducir la contaminación por plástico.
Para obtener más información, puede visitar el sitio web de Julio Sin Plástico .
Las «Botellas de Amor» son botellas plásticas llenas de plásticos difíciles de reciclar por su tamaño y su peso: papel film, envoltorios de alimentos, palitos de chupetín, vajilla descartable, sobres de café y de jugos, máquinas de afeitar (sin las navajas), lapiceras (sin el resorte ni la punta metálica) y cepillos de dientes, limpios y secos.
Además de la recepción de «Botellas de Amor», el GCBA propone:
● Tener siempre a mano una botella de agua reutilizable y no comprar botellas descartables.
● Desacostumbrarse a usar bolsas de plástico y -para hacer compras- reemplazarlas por bolsas ecológicas.
● De ser posible, contar con un juego de cubiertos de metal o de plástico duro para cancelar el uso de cubiertos desechables.
● Volver a los envases retornables.
Antecedente del tema en Diario 5: