• Diario 5 -Buenos Aires, martes 11 de febrero de 2025

Un completo informe sobre el fenómeno natural más trágico y -por muchos- olvidado en la Argentina. Video con el documental Vorágine de Fernando Molinas

49 años del Tornado de San Justo

El 10 de enero de 1973, la ciudad de San Justo, en la provincia de Santa Fe, Argentina, fue escenario del tornado más devastador registrado en el hemisferio sur. Clasificado como un F5 en la escala Fujita, este fenómeno dejó un saldo trágico de al menos 63 muertos y más de 350 heridos, además de destruir más de 500 viviendas y causar pérdidas materiales millonarias.

Aquel miércoles, tras una mañana de intenso calor, se observaron enormes nubes cumulonimbos que presagiaban tormenta. Cerca de las 14:15 horas, el tornado tocó tierra en las inmediaciones de las vías del Ferrocarril General Belgrano, al norte de la ciudad. Con un ancho aproximado de 300 metros, avanzó hacia el sur a lo largo de 1.500 metros, arrasando todo a su paso en un lapso de apenas siete minutos.

La fuerza del tornado fue tal que vehículos fueron lanzados a cientos de metros, árboles y postes arrancados de raíz, y edificaciones reducidas a escombros. Testigos relataron cómo el cielo cambiaba de color, pasando de un violeta intenso a un rojo debido al polvo de ladrillo levantado por los vientos. Incluso se reportó que el tornado absorbió el agua de una laguna a su paso.

El reconocido meteorólogo Dr. Ted Fujita, creador de la escala que lleva su nombre, calificó este evento como «el peor tornado registrado en el mundo fuera de las fronteras de los Estados Unidos».

Las consecuencias fueron devastadoras: más de 2.000 personas quedaron sin hogar, y la infraestructura de la ciudad sufrió daños severos. La comunidad de San Justo tardó años en recuperarse de esta tragedia, que dejó una marca imborrable en la memoria colectiva de sus habitantes.

A 50 años de aquel desastre, se han realizado diversos homenajes y producciones que buscan mantener viva la memoria de lo sucedido. Entre ellas, destaca el documental «Vorágine», dirigido por Fernando Molinas, que recoge testimonios de familiares de las víctimas y sobrevivientes, ofreciendo una mirada profunda sobre el impacto humano de esta catástrofe.

El tornado de San Justo de 1973 sigue siendo un recordatorio de la fuerza impredecible de la naturaleza y de la importancia de la preparación y resiliencia ante fenómenos meteorológicos extremos.

 

 

 

Para una visión más detallada y testimonios sobre este evento, vale la pena ver Vorágine:

 

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