La conmemoración de los 30 años de autonomía de la Ciudad de Buenos Aires marca un hito importante en su historia política y social, remontándose a la Reforma Constitucional de 1994, que permitió a la Ciudad contar con una Constitución propia y un Jefe de Gobierno elegido democráticamente.
Antes de esta reforma, Buenos Aires estaba bajo la órbita del Gobierno Nacional, y sus políticas dependían en gran medida de las decisiones tomadas a nivel federal. La autonomía trajo consigo la capacidad de tomar decisiones políticas, sociales y económicas de manera independiente, lo que permitió una gestión más directa de los recursos y una mayor cercanía con las necesidades de sus habitantes.
El encuentro conmemorativo organizado por el Instituto de Formación Política y Gestión Pública de la Ciudad reunió a destacadas figuras del gobierno porteño, como el jefe de Gobierno Jorge Macri y el jefe de Gabinete Néstor Grindetti, quienes subrayaron los avances alcanzados en materia de infraestructura, servicios públicos y gestión urbana. Mercedes Falcón y Pablo Bereciartua también reflexionaron sobre los desafíos que aún enfrenta la ciudad, como la necesidad de reforzar la autonomía judicial y la constante interacción con el poder central en temas de financiamiento y seguridad.
Desde la sanción de la Constitución de la Ciudad en 1996, la autonomía ha permitido a Buenos Aires avanzar en cuestiones fundamentales como las obras para evitar inundaciones, el transporte público, con la creación de ja red de metrobus y la modernización de las líneas de subterráneo y la inserción de la ciudad en el universo de la sustentabilidad ambiental.
Por otro lado, la creación de organismos judiciales propios, como el Tribunal Superior de Justicia de la Ciudad, consolidó el autogobierno porteño en términos legales.
Sin embargo, la relación entre el gobierno porteño y el nacional no ha estado exenta de conflictos. A lo largo de los años, la discusión sobre la coparticipación federal y los recursos transferidos a la Ciudad ha sido un tema de constante debate.
El recorte de la coparticipación en 2020, durante la presidencia de Alberto Fernández, generó tensiones que llevaron a una disputa legal en la Corte Suprema, lo que subraya la dependencia económica que aún tiene la Ciudad respecto de la Nación.
Este aniversario debería ser una oportunidad para reflexionar acerca de importantes temas del futuro, como la necesidad de seguir avanzando en la descentralización de la gestión y la implementación de políticas que fomenten una mayor participación ciudadana.
Los eventos que se realizarán a lo largo del mes buscan también fortalecer el sentido de identidad y pertenencia de los porteños con su Ciudad Autónoma, mientras se planifica un futuro de mayor integración urbana, tanto a nivel nacional como internacional.
Este evento marca una etapa importante, no solo en términos históricos, sino también en la evaluación del impacto que la autonomía ha tenido en la vida diaria de los ciudadanos y en las dinámicas políticas locales