DIARIO 5

Vecinal, Nacional, Global - Buenos Aires, 16 de julio de 2023 - Año XIV


El Gran Centenario

by Amalia Gutiérrez
El Doctor Favaloro no sólo fue el genial cardiocirujano que abrió todos los caminos del bypass de arteria coronaria. Estamos hablando del hombre más importante de la Argentina en el Siglo XX. El doctor fue un modelo de ética y profesionalismo avasallantes. En el centenario de su nacimiento, se prevén muchos actos, celebraciones y discursos. Algunos, ciertamente, lo homenajearán. Pero habrá otros. Si el problema radica en que los argentinos de bien no tienen qué defender o de dónde agarrarse para organizar, de una vez y para siempre, una nación, bastará con tomar las 10 premisas que el brillante médico estableció para que cumplan quienes querían ejercer la medicina en su fundación Nació el 12 de julio de 1923, en La Plata. René Gerónimo Favaloro se graduó como médico en la Universidad de La Plata en 1949 y posteriormente se especializó en cirugía torácica. A principios de la década de 1960, se unió a la Clínica Cleveland en los Estados Unidos, donde trabajó con el Dr. Claude Beck, un renombrado cardiocirujano. Durante su tiempo en la Clínica Cleveland, Favaloro desarrolló un interés particular en el tratamiento quirúrgico de la enfermedad arterial coronaria. En 1967 regresó a la Argentina y puso en marcha la Fundación Favaloro, una ultra novedosa institución médica dedicada a la investigación y el tratamiento cardiovascular. Fue allí donde realizó su innovador trabajo en la cirugía de revascularización coronaria, un procedimiento en el que se utiliza un injerto de vaso sanguíneo para desviar las arterias coronarias bloqueadas o estrechadas, mejorando el flujo de sangre al músculo cardíaco. La técnica pionera de Favaloro revolucionó el tratamiento de la enfermedad de las arterias coronarias, salvó innumerables vidas y redujo significativamente las tasas de mortalidad asociadas con la afección. Abogó por la importancia de la medicina preventiva y creía en brindar acceso a la atención médica a las poblaciones desatendidas. Además de sus logros quirúrgicos, Favaloro también fue un influyente defensor de la ética médica. Criticó abiertamente la comercialización de medicamentos y la influencia de las empresas farmacéuticas en las prácticas de prescripción de los médicos. Trágicamente, el 29 de julio de 2000, Favaloro se quitó la vida. Se cree que su decisión estuvo influenciada por las dificultades financieras que enfrenta la Fundación Favaloro, que luchaba por brindar atención médica gratuita a todos los pacientes, independientemente de su capacidad de pago. Las contribuciones de René Favaloro a la cirugía cardiovascular y su compromiso con las prácticas médicas éticas deben ser honradas en la Argentina. Fue un visionario que dedicó su vida a mejorar la vida de los pacientes que padecían enfermedades del corazón y tomó partido por disociar la alta complejidad médica de la capacidad de pago de quienes necesitan acceder a ella.