Ese debería ser el objetivo
Un informativo de una radio de alto rating, esta mañana, tras titular «llegó Julio», largó a aire, como cortina, un fragmento de «La Carretera» con la voz de Julio Iglesias. ¿Está prohibido eso? Para nada. ¿Sería censurable criticarlo y decir que, cono broma es malísima, gastada y grasienta? Menos aún.
Cualquier memero puede largar una pelotudez a la red. Es más, de eso se nutren las redes. Pero cuando los comunicadores se atribuyen licencias poéticas de un level por el que hay agacharse para entenderlo, deben asumir, con sus calzones lavados, los efectos del escarnio.
Está todo internet plagado de estúpidos chistes que juegan insoportables juegos de palabras con entre el nombre del mes de julio y la oxidada popularidad de Julio Iglesias. No sólo cansa, sino que deja fuertes muestras de que la corrosión alcanza también a las neuronas de los grandes generadores del barato entretenimiento del meme.
Ya en 2016, tras un mes de junio muy complicado para el ex ministro Julio De Vido, por entonces apenas expulsado de la Cámara de Diputados, aunque no aún detenido, en la víspera del arranque del séptimo mes de aquel año, Ensamble 19, la web de tapas más importante de la Argentina, dejó ver la portada de El Caza Pavos, publicación humorística del mismo grupo de medios que, en aquella oportunidad jugó con las palabras de un modo que -a nuestro criterio- la rompió con el título «Julio enloquecerá en lo que será Julio».
De manera que, en la medida de lo posible, muchos que se creen factótum de la raigambre cultural de occidente, deberían considerar que el mundo ya estaba inventado cuando ellos nacieron.