Los colectivos eléctricos comenzarán a operar en la Ciudad de Buenos Aires, aproximadamente, a de fin de año, a modo de prueba. Es una de las oportunidades de acción conjunta entre la Nación y la Ciudad, cuyo período experimental será de un año completo con unidades que se llevan bien con el medio ambiente.
La prueba la van a realizar las líneas 12, 34, 39 y 59 que tomarán las unidades en comodato. Es absolutamente sorprendente que empresas de jerarquía e influyentes en las decisiones de los gobiernos porteños en todo lo referido a obras y reformas en el tránsito, como Nuevos Rumbos (Línea 132) no participen en este trascendental giro que, dejará atrás, definitivamente, el uso de combustibles líquidos, en menos de 30 años, no sólo en la Argentina, sino en toda la región.
Pero, por ahora, habrá ocho colectivos de tres empresas fabricantes de buses eléctricos. Serán unidades importadas, de tecnologías diversas en cuanto al uso de la electricidad, recarga y provisión.
Transportes Automotores Callao SA es una de las empresas que deberá interactuar con Corven Motors Argentina SA, para que la Línea 12 cuente con dos unidades Zhongtong, de la Zhongtong Bus Holding Co. Ltd, con su fábrica en Liaocheng, China.
Juan B. Justo SATCI, que explota la línea 34, tarbajará junto a Vía Bariloche SA, la representante e importadora de las unidades de la Higer Bus Company Limited, probablemente la más importante fábrica china de buses, en la ciudad de Suzhou. La 59 de MOCBA, Microomnibus Ciudad de Buenos Aires SATCI, estará vinculada a Colgas SA, que representa e importa los buses de Zhengzhou Yutong Bus Co. Ltd, de la Ciudad de Zhengzhou.
La otra empresa de transportes que hará un seguimiento de colectivos eléctricos con la Corven Motors Argentina SA, es Transportes Santa Fe SACEI, por la Línea 39. Esta vez, Corven aparecerá como representante importador de Xiamen King Long United Automotive Industry Co. Ltd., empresa establecida en Fujian Sheng, República Popular China.