• Diario 5 -Buenos Aires, sábado 18 de enero de 2025

Federico en Buenos Aires y la 704 del Castelar

PorCarlos Allo

Ago 19, 2018

Federico en el Castelar
Federico en el Castelar

A 82 años de la lágrima más inmensa que se haya derramado en el mundo cultural de habla hispana, nos damos consuelo de un duelo que siempre se renueva, autoabrazándonos como quien abraza la prenda de un ser querido y perdido. Es el recuerdo del glorioso paso de Federico García Lorca por la Avenida de Mayo cuando ésta se jactaba de competir tête à tête con La Gran Vía, la Champs Elysées, Oxford Street y la 5ta Avenida.

Ya lo habíamos contado cuando se produjo la apertura del mágico cuarto para que el público tuviera la oportunidad de conocerlo. Hagamos poesía en nuestra proyección imaginativa hacia octubre de 1933.

El Castelar es un hotel con historia y perlas de la propia historia. Su dueño original, Francisco Piccaluga, era un ferviente republicano y el nombre del elegante edificio de la legendaria Avenida de Mayo está relacionado con esa pasión ideológica del empresario, ya que el nombre Castelar alude a Emilio Castelar, presidente de España durante la Primera República.

Con ese nombre y ese lujo para los tiempos de una Avenida de Mayo de ensueño, ¿a qué otro lugar iría Federico García Lorca a vivir en Buenos Aires?

Es la 704. Nadie la volvió a tocar. Jamás se incorporó al stock operativo para que el hotel facture lo que rentaría una habitación más. Allí, Federico escribió:

“Buenos Aires tiene algo vivo y personal; algo lleno de dramático latido. Yo sé que existe una nostalgia de la Argentina, de la cual no quiero librarme”.

El genial poeta granadino dejó una estela de misterio, mitos y curiosidades en esa 704 de Av de Mayo entre Lima y Salta. En una visita que le hizo Pablo Neruda, Federico planeó su viaje a Chile.

A veces hay visitas del público al lugar donde el autor de Bodas de Sangre se preparó para impactar al universo cultural argentino en aquel 1933, cuando lo invitó Lola Membrives.

Lo visitaremos y sabemos por anticipado la emoción de estar en un lugar que fue preservado durante 80 años, quizás para no molestar alas musas que, quien sabe, aún se desperezan en la 704.

Carlos Allo

Editor de Diario 5 y Ensamble 19. Productor integral de Radio Clasica.

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