Domingo 7 de agosto. El plan de ir pedaleando a la radio arrancó sin inconvenientes al retirar una bicicleta en la estación 91 de Pasco y Chile a las 09.35. Desde ese punto de la Ciudad, hasta Rivadavia y Piedras el cálculo de llegar unos minutos antes de las 10.00 estaba bien realizado. Efectivamente, alrededor de las 09.53 me acercaba a la Estación Número 37, ubicada en la Plaza Roberto Arlt. Ya a pocos metros ví cuatro bicicletas de un lado de la barra de anclajes y otras cuatro que las enfrentaban, ancladas del otro. Ocho bicicletas a la vista y, eventualmente, disponibles.
Enorme fue mi sorpresa cuando al acercarme a depositar la bicicleta en alguna de las posiciones libres, ninguna de ellas se encontraba apta para la recepción: todos los anclajes no ocupados estaban bloqueados con tapas metálicas atornilladas. Estaban deshabilitadas, provocando la imposibilidad de devolverle allí la bici al sistema.
Me encontraba a escasos minutos de la hora de iniciar mi trabajo, en la puerta misma de la emisora y tenía una bicicleta pública que debía devolver, pero en otro lugar. Curiosamente, la afamada chorrera de epítetos que se suele proferir en un caso así, no fue dedicada ni al Jefe de Gobierno ni al anterior, sino a mi decisión de sentirme «cool» yendo a trabajar en bicicleta.
Partí hacia la Legislatura Porteña, cercana estación, la 16. Ya estoy jugando contra el reloj y la placidez del viaje se había transformado en esa espantosa tensión de tener que solucionar un problema que no debería serlo. Al llegar, compruebo lo que me hace explotar de bronca: todos los anclajes de la barra también estaban tapados.
Me ví sin posibilidad de llegar a tiempo y sin un aparente destinatario inmediato de insultos, aunque dos efectivos de la Metropolitana, a quienes les pregunté por la no disponibilidad de los anclajes y me respondieron que se rehabilitarían al día siguiente (lunes 8 de agosto), hicieron mérito.
Tardé desde allí unos 5 minutos en llegar a la Estación Nro 7, Obelisco, de Perón y Carlos Pellegrini para dejar, finalmente, la bicicleta y otros 5 minutos caminando para llegar nuevamente e ingresar a la radio, previa llamada para avisar acerca de mi desventurada tardanza.
Sería comprensible que cualquiera venga a reprocharme que no haya observado las previsiones online, es decir, que el sitio de Ecobici, seguramente debería tener publicada la inhabilitación de las estaciones. Puede ser, aunque me reservo cierto derecho a confiar en la estabilidad de los servicios establecidos por el Estado.
Ecobici es, en líneas generales, un buen servicio. No obstante, desde algún área no identificada y poco definida del GCBA se huele un tufillo a «yo te lo doy gratis y es como es. A caballo regalado…»
El servicio habrá de ser servicio o deberá ser anulado. ¿Hay inconvenientes en mantener funcionando esos anclajes en el fin de semana? ¿El problema es permanente? Es necesario hablar y hacer saber. Lo que no se puede hacer es considerar que los ciudadanos pueden ser pasibles de minifraudes, agachaditas del Estado o cambios de reglas sobre la marcha y que encima el porteño se mantenga en silencio y contento con la galletita que le tiran.
Es fundamental que Ecobici tenga un vocero y que ese comunicador sea veloz. Para que ese mensaje llegue fresco al público, el sistema interno que comunica el estado de situación debe ser fluído. Para eso, el personal que trabaja en las áreas y subáreas involucradas debe ser eficiente. Para tal fin, ese personal debería contar con ciertas características personales que incluyan una lucidez media, no depender al 100% de la repetición de tutoriales de trabajo y cierta tendencia al ejercicio del pensamiento propio. Tomando en cuenta esta última premisa, la conclusión recae, de modo contundente, en la imposibilidad de cumplir el objetivo.
En sarandi y carlos calvo hay hace casi dos años una estacion que no se habilita ,lo cual mas que beneficios trae molestias para los vecinos ,ya que es usado por gente como lugar de encuentro para drogarse ,tomar etc .la responsable de dicho anclaje la Sr Gisela Milano del departamento de transporte y transito (tel. 5030-9100 int 128 )a cargo del director ,(email hterrile@gmail )sr Hugo terrile, manifiesta que pronto sera inaugurado (ese «pronto» lo vengo escuchando desde hace mas de 6 meses que inicie los reclamos)