• Diario 5 -Buenos Aires, jueves 10 de octubre de 2024

Bicentenario: Bandas Militares con nuevos criterios

PorCarlos Allo

Jul 11, 2016

foto2033La ausencia de desfiles militares y conciertos de bandas durante tantos años, disparó decenas de comentarios referidos a lo que se vio y escuchó en el Campo Argentino de Polo, con múltiples variantes de interpretación por parte de algunas agrupaciones invitadas que, con incorporaciones un poco alejadas del estricto esquema militar en las interpretaciones, con ciertos instrumentos no tradicionales y la inclusión de danzas más cercanas al arraigo popular dejaron en evidencia que los argentinos ya no somos los de antes.

En el planteo está la mismísima respuesta: Fueron demasiados años. Quizás 20 de algún esbozo de desfile clásico y más de 35 de los que, alguna vez, poblaban las fechas patrias de manera indefectible.

Nadie ignora que la imagen militar remitió -y seguramente aún lo hace- a los tiempos en que los uniformes eran la imagen de un poder político ilegítimo que se repitió durante décadas. Sin embargo, el tiempo transcurrido, el accionar de la justicia -con mayor o menor tibieza frente a los crímenes, abusos y despojos- y una cierta dosis de deseo de intentar algunos acercamientos entre sectores distantes del país, hicieron posible que el segundo de los dos bicentenarios claves de la Nación, incluyera para su celebración, una muestra que alguna vez fue tradición sellada.

Qué es lo que dejó sorpresas en el desfile de bandas militares en el CAP? A lo más jóvenes, todo. Pocos de ellos tuvieron oportunidad directa de escuchar a estas agrupaciones a lo largo de sus vidas. En tanto, a quienes conocimos las antiguas formaciones, nos encontramos con una singular transformación de estilo de presentación de algunas agrupaciones, sobre todo en la incorporación a los repertorios de canciones populares de cada país que no coincidía con la imagen de desfile militar que teníamos en nuestro recuerdo.

Foto2042Por qué esa pequeña sorpresa? Volvemos al planteo «autorrespondido» en el planteo inicial: Durante los últimos 40 años, el desarrollo de las costumbres sociales de todo el mundo generaron adaptaciones en todos los órdenes en los que la interpretación musical está presente. El tema es que los argentino hemos estado ausentes de conocer esas adaptaciones, sencillamente porque no veíamos desfiles militares modernos.

Creíamos que íbamos a sacar del freezer una manera de celebración de un día patrio y que nos enfrentaríamos ceñidamente a una pompa estricta y sin variedad, como lo eran aquellos desfiles de la Av. del Libertador, en Plaza San Martín o la Av de Mayo. Y nuestras agrupaciones se acercaron a eso. Pero la sorpresa fue que las bandas de otros países, acostumbradas en los últimos años a la necesidad de generar aggiornamientos para ganar atención, tienen un desarrollo que desconocíamos que podrían portar las orquestas de uniformados.

Fue la Banda Conjunta de las Fuerzas Armadas del Perú la que alcanzó el máximo estado de desacartonamiento incorporando en sus alegres interpretaciones de danzas nacionales a una pareja de bailarines que hicieron las delicias del público cuando se respiraba en la húmeda tarde de Palermo que el cierto tedio podía apoderarse de los ánimos si esa 16a agrupación llegaba a mantener las fórmulas tradicionales. Y de inmediato, la Banda de Músicos de la Fuerza Aérea del Uruguay puso otro toque de fiesta al interpretar el tango «la Puñalada» a ritmo de candombe, con varios tamborileros al frente de sus filas.

Otro momento menos militarizado en la música lo ofrecieron los marines norteamericanos, que incorporaron pasajes de jazz, no sólo en el estilo de Big Band y con baladas cantadas, sino también bases de bebop con improvisaciones y solos dignos de una jam session.

La banda española incluyó, entre otras melodías resumidas de pasodoble, las de «L Gato Montés» y  «Que viva España», aparte del Concierto de Aranjuez de Joaquín Rodrigo. En tanto, nadie daba crédito a la osadía del «cantor» francés del grupo de paracaidistas, que cantó Mi Buenos Aires Querido, de Gardel y Le Pera y lo hizo bastante mal. Los visitantes brasileños no esquivaron la tendencia de tocar las piezas representativas de cada patria, por lo que durante unos minutos generaron el acompañamiento con palmas por parte del público argentino cuando se introdujeron en Acuarela do Brasil, la eterna leyenda musical creada por Ary Barroso.

Estaremos inmersos en una discusión política (sólo en los medios de comunicación, claro) por la decisión de incorporar este desfile como patre de las celebraciones del Bicentenario de la Independencia Argentina pero hay que tomar en cuenta que la inmensa mayoría de chicos que estuvieron presentes jamás creerán, en el futuro, que escuchar «Avenida de lasa Camelias» lo pueda transformar en un monstruo golpista, gorila y cipayo al mismo tiempo. Creerá, más bien, que tocar unas musiquitas militares durante un rato en una fecha patria es apenas una pequeña porción de los aspectos que abarcan a una fecha patria.

 

Carlos Allo

Editor de Diario 5 y Ensamble 19. Productor integral de Radio Clasica.

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