Hay una tuneladora trabajando en el Oeste de la Ciudad de Buenos Aires. Excava en la Cuenca del Arroyo Cildañez, extendiendo el ramal secundario Yerbal.
Es parte del Plan Hidráulico porteño que debe seguir buscando rutas de desagües que eviten anegamientos cuando llueve más de la cuenta.
Bajará el riesgo de inundaciones en Floresta, Vélez Sarsfield y Villa Luro.
El conducto principal de hormigón armado se extiende por 2,3 kilómetros, debajo de la calle Yerbal, desde la calle Bahía Blanca hasta Ruiz de los Llanos. Estos trabajos, que no son sencillo y terminan no quedando a la vista, suelen ser largos y costosos.
Efectivamente, Jorge Macri, remarcó que se trata de hacer «esas obras que no se ven, pero que le cambian la vida a los vecinos».
El equipo de ingenieros del ramal Yerbal tiene previsto para el último trimestre de 2024, finalizar la obra.
Si bien ya están terminados los ductos de drenaje de los arroyos Maldonado, Vega y Cildáñez, es necesario que en los los ramales secundarios de esas cuencas, también se realicen obras hidráulicas.
En la zona de la Cuenca del Cildáñez viven más de 100 mil personas.
el Ministro de Infraestructura, Pablo Bereciartua, considera al Plan Hidráulico «una herramienta de política púbica para adaptar la ciudad al cambio climático”. Sobre el punto, el jefe, Jorge Macri, recordó que el cambio climático ya ocurre y es una realidad, por lo que hay que pensar «en el hoy y en un futuro más difícil”.
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