Los peruanos que llegan a Buenos Aires suelen mostrar su admiración por la basílica que honra a su Santa. El templo de Santa Rosa de Lima, en Belgrano y Pasco, tiene características sumamente especialles, tomando en cuenta que no se trata de una construcción de los tiempos del Virreinato, cuando las construcciones de las iglesias, marcaban un estilo absolutamente pretedeterminado de la era colonial. Éste, en cambio, es un edificio con marcadas combinaciones neoclásicas y románicas y mucha inspiración en la francia católica de mediados del S XIX, especialmente la Catedral de Périgueux.
Si bien la construcción de la Santa Rosa porteña se hizo 80 años más tarde que su inspiradora principal, hay que tomar en cuenta que la Buenos Aires del Centenario (1910) fue acreedora de una capitalización inconmensurable a causa de la exportación de materias primas alimenticias, lo que abrió la posibilidad de la construcción de centenares de de proyectos palaciegos y basílicas monumentales que le dieron a Buenos Aires la impronta europea que valorizó a la Ciudad durante algún tiempo.
El aporte estilítico Románico proviene de la Edad Media Es el paso hacia una manera de realizar las construcciones grandes, fuertes y valiosas, una vez que quedaron atrás los tres grandes súper estilos griegos que marcaron la antigüedad y que se recuperaron recién en el Renacimiento (Dórico, Jónico y Corintio).
La iglesia de Belgrano y Pasco se llevó una combinación de métodos estéticos que la transformaron en única, más allá de algunas influencias que la Sra Remedios Unzué de Alvear, parte de los donantes del capital para la construcción, le transmitió al noruego Alejandro Christophersen, arquitecto top en la Argentina para el año 1928.
La basílica es famosa en el mundo, aunque -como es costumbre- en Baires sólo se la reconozca como el lugar desde donde salen las procesiones de los 30 de agosto, día de la santa homenajeada.
Ella
Isabel Flores de Oliva, eternizada como Rosa de Lima, vivió entre 1586 y 1617 es la primera santa del continente americano. Se celebró el 30 de agosto hasta 1970, para luego pasar a celebrarse el 23 de agosto, excepto en el Perú. Allí se continúa con la tradición de honrar su figura el 30.
Nació en 1586 en Lima, en el virreinato del Perú. Procedente de una familia pobre, es la décima hija de padres nacidos en la península1.
Poco después de los cuatro años (1590), supo leer, sin haberlo aprendido nunca, y se nutrirá del relato de la vida de santa Catalina de Siena, canonizada en 1461, que se convertirá en su modelo de vida espiritual. . Entonces decide dedicar su vida a Dios.
A los veinte años, en 1606, tomó el hábito de los terciarios dominicanos. Pero, como no había convento en la ciudad donde vivía, se refugia en una pequeña ermita, al fondo del jardín de sus padres, donde pasará el resto de sus días en oración y mortificaciones.
También se benefició de las gracias místicas, tanto que la desconfianza de la Inquisición le valió varios exámenes por parte de las autoridades religiosas. La profundidad de sus respuestas asombró entonces a sus detractores.
Al mismo tiempo, se dedica al servicio de los indígenas, los niños abandonados, los ancianos, los enfermos y los enfermos.
Cuando murió en 1617 a la edad de 31 años, la gente de Lima se apresuró a ir a su tumba para recolectar parte de la tierra que la cubría. Leonard Hansen escribió la primera biografía de «Rosa Peruana» en 1664.2
Fue canonizada por el Papa Clemente X el 12 de abril de 1671.
Espiritualidad
Sainte Rose de Lima (Noël Laudin – Museo de Châlons-en-Champagne.
Rose de Lima vivió una vida de penitencia y maceración que, sin una profunda vida mística, hubiera sido insoportable.
Siguiendo el ejemplo de Catalina de Siena, desde su infancia practicó el ayuno, rechazando la carne y la fruta.
Más tarde, solo se alimenta de pan y agua.
A través de una intensa penitencia corporal, se ofreció a Dios como víctima sangrienta en unión con Cristo por la redención de las almas del Purgatorio y la conversión de todos los pecadores.
No contenta con las tablas de madera sobre las que dormía, se hizo una cama con trozos de madera atados con cuerdas y luego llenó los huecos con fragmentos de vajilla y azulejos con los bordes afilados hacia arriba. Dormirá en esta cama durante los últimos 16 años de su vida.
En sus meditaciones y oraciones, sintió el dolor de hombres de todos los orígenes y creencias y rezó por su conversión.
Noticias
La basílica construida sobre la ermita de Santa Rosa de Lima.
Rose de Lima de Thibaud Maistrier.
Santa Rosa de Lima es patrona de las Américas, de Filipinas, del Perú, de la ciudad de Lima, de la Policía Nacional y de la Universidad Católica del Perú.
Cada año, con motivo de la Solemnidad de Santa Rosa de Lima, el 30 de agosto (festivo en el Perú), una ceremonia religiosa reúne a las autoridades políticas, diplomáticas y militares del país. Luego, su estatua es llevada en procesión desde la catedral de Lima hasta el santuario dedicado a él. También está en el origen de la tradicional fiesta del reino de Araucanía y Patagonia el 30 de agosto.
Su culto parece haberse establecido en Francia desde su canonización, ya que hay una estatua suya ejecutada por Thibaud Maitrier para la iglesia de Saint-Exupère en Toulouse, reconstruida por los carmelitas entre 1620 y 1623.
En Quebec, fueron nombrados en su honor el distrito de Sainte-Rose de Laval, la rue Rose-de-Lima en Montreal en el distrito de Saint-Henri, así como un pueblo de Abitibi llamado Sainte-Rose de Poularies.
El último rey de Ruanda, Kigeli V, creó una baronía de Sainte Rose de Lima el 25 de julio de 2016.
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