La Feria del Libro vivió una jornada única. Es que la de este sábado fue la única prevista para la trasnoche. En el marco de la celebración de la Noche de la Ciudad, organizada por el Ministerio de Cultura porteño, la entrada fue libre y gratuita. Así, muchos de los que decidieron quedarse en Buenos Aires en Semana Santa, pudieron disfrutar de actividades tanto dentro de la Feria como al aire libre y participar del cálido homenaje a María Elena Walsh, en Plaza Italia.
Para este evento se cortó la calle Sarmiento, que bordea el predio de la Rural, y se levantó un gran escenario. Para homenajear a quien marcó por igual a grandes y a chicos con sus canciones, hubo un show en el que se pudo revivir sus amadas «Manuelita» y «Serenata para la tierra de uno», entre otras.
Luego hubo un show de ritmos latinoamericanos a cargo del grupo Dos gardenias, y tres espectáculos que mezclaron la música y la literatura: «Malyevados + 34 puñaladas» con fragmentos de la obra de J.L. Borges, un recital poético basado en «El cuervo» de Edgar Alan Poe y por último, la presentación de Cecilia Szperling y La Cosa mostra.
Entre las actividades que se realizaron dentro de la Feria, se destacaron dos espectáculos fuera de lo común. Por los pasillos de la Feria, los visitantes se pudieron encontrar con la Compañía del Tempranillo, un grupo que música teatral del Siglo de Oro español y con el Grupo Clown-destinos del Taller de Clown de la Escuela Metropolitana de Arte Dramático.
También hubo un espectáculo sensorial en la sala Juana Manuela Gorriti, con palabras, sonidos, historias y danza. Pero eso no fue todo: la Banda Sinfónica de la Facultad de Filosofía y Letras, una agrupación integrada por más de 50 jóvenes, recorrió con su música los pasajes de la Feria.